Estas bolas de pollo son perfectas para compartir en reuniones o como aperitivo. Son crujientes por fuera, jugosas por dentro, y tienen un sabor delicioso. Además, ¡son muy fáciles de hacer!
Ingredientes
- 500 g de pechuga de pollo molida (o puedes picarla finamente)
- 1 huevo
- 1/2 taza de pan rallado (y un poco más para el empanizado)
- 1/2 taza de queso parmesano rallado
- 2 dientes de ajo picados finamente
- 1/4 de cebolla picada finamente
- 1 cucharada de perejil fresco picado (opcional)
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite vegetal para freír
Instrucciones
- Preparar la mezcla de pollo: En un tazón grande, mezcla el pollo molido, el huevo, el pan rallado, el queso parmesano, el ajo, la cebolla y el perejil. Agrega sal y pimienta al gusto. Amasa bien la mezcla hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.
- Formar las bolas de pollo: Con las manos, forma pequeñas bolas de la mezcla de pollo, de aproximadamente el tamaño de una nuez. Si quieres que las bolas queden más uniformes, puedes usar una cuchara para medir.
- Empanizar las bolas: Coloca un poco de pan rallado en un plato y pasa cada bola de pollo por el pan rallado, asegurándote de cubrirlas completamente.
- Freír las bolas de pollo: Calienta suficiente aceite en una sartén profunda a fuego medio-alto. Una vez caliente, fríe las bolas de pollo en pequeñas tandas hasta que estén doradas y crujientes, aproximadamente 4-5 minutos por cada lado. Asegúrate de que el interior esté bien cocido.
- Escurrir y servir: Saca las bolas de pollo del aceite y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Opcional: Salsa para Acompañar
Puedes acompañar las bolas de pollo con una salsa agridulce, salsa de ajo, mayonesa con mostaza o una salsa picante de tu elección.
¡Listo! Estas bolas de pollo crujientes son deliciosas y versátiles, perfectas para cualquier ocasión.